Hoy me nace quedarme contigo,
no por huir del mundo,
sino por inventarlo de nuevo
entre las paredes tibias
de una cama que no juzga
ni pregunta la hora.
Se me dibuja el deseo
en la rutina suspendida:
ver llover sin hablar,
contarte un secreto
con cada bocado compartido,
buscar en tu piel
las sílabas que aún no pronuncio.
No es urgencia lo que me arde,
es un fuego que camina lento,
que sabe a pausa,
a detalle,
a descubrir en tu espalda
nuevas formas de ternura.
Quiero nombrar
cada rincón de tu cuerpo
como quien funda un país
y luego se queda a habitarlo,
sin leyes ni mapas,
solo el ritmo de tu aliento
y el temblor suave
de tu risa inesperada.
No hay deber más sagrado
que el de verte dormir
con una tregua en el pecho,
y saber que en el mundo
solo tú y yo existimos
por un rato largo,
eternamente breve.
No busco promesas,
sino tardes como esta,
donde el tiempo se rinde,
y amarte
se vuelve la única forma
de habitar la vida.
Explicación del poema:
Este poema es una declaración de amor cotidiana y carnal que apuesta por la entrega total desde la intimidad y la pausa. No se centra en lo grandioso ni en lo épico, sino en los momentos lentos, sensuales y profundamente humanos que construyen el amor real: compartir el desayuno, mirar la lluvia, redescubrir el cuerpo y las emociones del otro con ternura. La pasión aquí no es efímera ni posesiva, sino un deseo sereno, detallista y lleno de presencia emocional. La melancolía aparece como el anhelo de que esos momentos duren, y la esperanza vibra en cada gesto de cariño que busca repetirse sin desgastarse.
Prompt para generar imagen basada en el poema:
«Una pareja abrazada en una cama desordenada durante una mañana lluviosa. La habitación está iluminada con luz natural suave que entra por una ventana donde se ven gotas de lluvia. Hay una bandeja con café y desayuno sobre la cama, libros abiertos, ropa dispersa con naturalidad. El ambiente transmite calidez, amor sereno y deseo sin prisa. Sus cuerpos están entrelazados bajo una sábana blanca, y uno de ellos acaricia el cabello del otro mientras sonríe con los ojos cerrados. Estilo pictórico romántico realista con tonos cálidos y suaves.»