
Yo era un paisaje de ceniza y sal,
un litoral sin barcos que esperar.
Un alfabeto roto en la garganta,
una pregunta inmóvil, sin respuesta.
Y entonces tú. No como el sol que ciega,
sino como la lumbre que se entrega
lenta en la madera, un calor hondo.
Llegaste a habitar mi centro más profundo.
Hay una vibración que me recorre
cuando tu calma junto a mí discurre.
Un nudo de luz tensa mis adentros,
desarmando la lógica del tiempo.
Amarte es esta herida que florece,
esta certeza lúcida que crece
en la grieta estéril de mis ruinas.
Eres la sed y el agua que la culmina.
Explicación del Poema
«Materia Primordial» explora el amor como una fuerza transformadora y fundamental, casi creacional. El poema se narra desde una voz que no se define por su género, sino por su estado emocional, permitiendo que cualquier persona pueda habitarla.
Comienza describiendo un estado de desolación y vacío existencial («paisaje de ceniza y sal», «alfabeto roto»), una existencia incompleta y sin propósito. Esta melancolía inicial sirve como lienzo para resaltar el impacto de la llegada del ser amado.
La aparición de «tú» se presenta no con la grandilocuencia del sol, sino con la intimidad y la calidez de una «lumbre» en la madera, un calor que es lento, profundo y personal. Este simbolismo busca alejarse de los clichés para centrarse en una sensación más subjetiva y tangible.
El poema profundiza en las sensaciones físicas e internas que provoca este amor («una vibración que me recorre», «un nudo de luz»), alterando la percepción de la realidad y el tiempo. Finalmente, el amor se revela en su complejidad a través de la paradoja: es una «herida que florece» y, a la vez, «la sed y el agua». Esta dualidad refleja la naturaleza humana, donde la vulnerabilidad y la plenitud coexisten, y donde el amor es tanto una necesidad vital como la satisfacción misma de esa necesidad. La esperanza no es un simple optimismo, sino el florecimiento que surge de las propias «ruinas», una belleza resiliente y poderosa.
Prompt para la Creación de una Imagen
Prompt:
A cinematic, hyper-realistic image with a painterly feel. An androgynous figure, seen from the back, stands in the center of a vast, desolate landscape of cracked, grey earth, reminiscent of a dry lakebed under a twilight sky with dramatic, melancholic clouds. From a large, glowing fissure in the ground before them, a warm, soft, golden light emanates, illuminating the figure and casting long, gentle shadows. This light is the only source of warmth and color in the scene, symbolizing a profound and burgeoning hope within the desolation. The atmosphere is ethereal, contemplative, and intensely emotional. 8K resolution, dramatic lighting, epic scale.
