
Si un día tus pasos tiemblan en la bruma
y la voz que fuiste se pierda en el eco,
yo seré quien escriba en tu silencio
la memoria feroz de tu destello.
Porque te vi erguida ante los vientos,
con las manos abiertas a la vida,
y aún cuando llorabas en secreto,
tus ojos eran faros, no heridas.
Si decides huir de tu reflejo
porque el mundo se vuelve más incierto,
yo te guardaré en la tibia certeza
de que fuiste fuego en cada invierno.
Y cuando la tristeza te convenza
de que no fuiste bastante o completa,
mi voz te recordará sin medida:
fuiste todo, incluso cuando eras niebla.
Explicación del poema:
Esta respuesta poética actúa como una promesa y una vigilia. Mientras el poema original celebra la fuerza, autenticidad y resiliencia de una mujer valiente, este nuevo texto responde desde la ternura de alguien que ha sido testigo de esa fortaleza y que se compromete a recordársela en los momentos de duda. Se convierte en un ancla emocional que rescata su esencia cuando ella misma la olvide, combinando melancolía, protección y una esperanza reconfortante.
Prompt para crear la imagen en Copilot:
«Una figura femenina caminando entre la niebla en un paisaje solitario, con luces cálidas emergiendo desde el horizonte. A su alrededor, sombras suaves insinúan recuerdos flotando, como fragmentos de fuego y pétalos en el aire. Al fondo, una silueta luminosa la observa desde lejos, como un guardián del alma. El ambiente transmite introspección, consuelo y una promesa silenciosa de esperanza.»