No quiero amores a medias,
ni historias que se deshacen en la boca
como promesas no dichas.
No vine al mundo a ser paréntesis
en vidas sin páginas completas.
Si me acerco,
es con las manos abiertas
y el alma sin coraza.
No me basta el “fluye”,
cuando yo soy río,
cuando yo soy cauce,
cuando me entrego sin miedo
a los desbordes del corazón.
No me interesan los casi,
los “tal vez”,
los “vamos viendo”.
Yo soy de los que miran a los ojos
y no parpadean ante la ternura.
Si te busco,
es porque tengo espacio en mi vida,
no en mi agenda.
Es porque quiero verte con calma
y no entre excusas ni pausas programadas.
No me avergüenza querer de verdad,
ni decir que espero constancia,
que deseo refugio,
que elijo reciprocidad
como quien elige oxígeno.
Porque amar no es una moda,
ni un juego para matar el tiempo.
Es una llama que se alimenta
de dos fuegos que no se esconden.
Y si eso me hace cursi,
entonces bendita sea la cursilería
que me mantiene humano
en un mundo que teme sentir.
Explicación del poema:
“Amar Sin Mitades” es una declaración poética de amor consciente, comprometido y sin disfraces. Parte de la honestidad emocional para reivindicar la profundidad en los vínculos humanos. A través de un lenguaje simbólico y directo, el poema denuncia la superficialidad de los vínculos modernos y celebra la valentía de quien ama con todo el corazón. Esta obra conecta con lectores de todas las edades que han sentido el vacío de lo superficial y el deseo genuino de una conexión real, estable y honesta. Es una defensa de la sensibilidad sin vergüenza, de amar sin diluirse.
Prompt para imagen acorde al poema:
Una figura humana de pie en medio de un puente que cruza un río caudaloso, de noche, con el cielo estrellado reflejándose en el agua. En una mano, la figura sostiene una antorcha encendida, y en la otra, un corazón simbólico de cristal brillante. A lo lejos, se ven luces borrosas (personas sin rostro) que se desvanecen entre niebla. El rostro de la figura muestra firmeza, ternura y esperanza. El entorno es poético, melancólico pero lleno de fuerza interior. Estilo artístico: suave, con trazos de luz cálida y sombras profundas.