Desde que te fuiste, el mundo perdió su equilibrio,
como si cada cosa que toco y veo te extrañara también.
Tu ausencia se convierte en un eco constante,
un murmullo suave que me recuerda cuánto te necesito.
Despierto con el deseo de encontrarte a mi lado,
y en cada paso del día, solo pienso en ti.
Es en el silencio de la noche, en la calma de mis sueños,
donde mi corazón te llama, donde el anhelo se hace más fuerte.
Eres parte de mí, un susurro en mi alma,
la pieza que completa mi ser.
Cada latido me recuerda que un fragmento de mí
te pertenece y viaja contigo, dondequiera que estés.
Hasta el día en que tus manos tomen las mías,
este amor, esta falta, será la brújula de mis días.
Y mientras tanto, en cada pensamiento, en cada respiro,
sigo extrañándote, amor, hasta el día en que vuelvas a mí.
📜 Título del poema: Ecos de Tu Ausencia
- Tema: Ausencia y añoranza en el amor.
- Estilo: Lírico, introspectivo.
- Tono emocional: Tristeza, nostalgia, anhelo y devoción.
- Formato: Verso libre, con un ritmo pausado y reflexivo.
- Figuras retóricas predominantes:
- Metáfora: «El mundo perdió su equilibrio», «tu ausencia se convierte en un eco constante».
- Personificación: «Cada cosa que toco y veo te extraña también».
- Imágenes sensoriales: «Murmullo suave», «silencio de la noche», «calma de mis sueños».
- Anáfora: Uso de «en cada» para enfatizar la persistencia del recuerdo.
- Imágenes principales:
- El mundo desequilibrado por la ausencia.
- El eco constante como símbolo de la presencia invisible del ser amado.
- La noche y los sueños como espacios donde el anhelo se intensifica.
- La brújula como metáfora del amor que guía.
- Categoría asignada: Amor y desamor (específicamente, ausencia y añoranza).
Análisis adicional:
Este poema complementa perfectamente al anterior (En Cada Latido, Eres Tú), ya que ambos exploran el amor en la distancia y la conexión emocional a través de la ausencia. Sin embargo, Ecos de Tu Ausencia tiene un tono más melancólico y reflexivo, lo que lo convierte en un buen candidato para seguir al primero en una secuencia que va desde la esperanza hacia una profundización en la tristeza y el anhelo.