No es el estruendo ni el grito que definela melodía honda que en mi pecho anida,ni el fulgor cegador que a otros iluminala senda humilde por donde va mi vida.Hay un lenguaje tácito, un saber profundo,un eco antiguo que el alma reconoce,lejano al clamor vano de este mundo,donde el ser,...
En mí, la flor se abre sin temor,no por fragilidad,sino por la urgencia de sentirse vivabajo el roce del viento que sabe nombrarla. Tu presencia no llega,irrumpe como un sol hambrientotras las nubes de mi espera,y sin pedir permisohabita los rinconesque solo el fuego reconoce. Soy tierra húmeda en tus...
Hay un lugar en míque aún guarda tu nombrecomo si fuera un secreto compartidocon el viento y las paredes. A veces arde —como un sol que no supo ponerse a tiempo,otras, se hiela —como un adiós que se dijo sin voz,pero nunca desaparece. Te amé con las manos abiertas,como quien...
Llegaste sin ruido,como el aroma de la lluvia antes de caer.No preguntaste si podía,te instalaste en mi carnecomo si ya supieras dónde dolíay dónde nacer. Tu mirada no pidió permiso,fue un incendio serenoque quemó mis dudas una a una,dejando sóloel temblor dulce de lo inesperado. No fue tu cuerpo,fue la...
Nos quedamos.Aunque la noche se arrugue de miedoy el viento nos hable en idiomas rotos,nos quedamos.Con las manos temblando,con el pasado haciendo ruido en los rincones,pero con el alma,esa, quieta y decidida. Nos encontramos tarde—dicen—como si el tiempo supiera algoque el amor aún no comprende.Pero llegamos.Y eso es másde lo...
No sé si llegamos tardeo si este es, por fin,el instante exactodonde el tiempo decide detenersepara mirarnos. Hay dudas, sí.Y los miedos…esos duermen bajo la camacon nombre propio y voz de otros días.Pero hoy,estamos aquí. No nos debemos certezas,solo la verdad de los cuerposque no huyeny de las miradas que...